Se habla de educación...
Mi vecino de enfrente, un hombre mayor y muy bien educado se queja porque cuando en la escalera hay demasiado escándalo mis perritas ladran (pobres lo único que piden ellas es algo de tranquilidad), y luego él se dedica a escupir en el rellano vaya. Se dice de los jóvenes que somos maleducados, atrevidos, etc. Yo creo que hay de todo, lo que pasa es que cuando un joven replica a alguien mayor siempre se pone de excusa que somos unos groseros. Pues yo digo que no me da la gana dejar subir antes que yo al autobús a 5 viejas que vienen de dar su paseito por el mercado y gastarse toda la pensión si he llegado antes que ellas, además precisamente vengo de eso de recibir educación. Y si una abuela se me intenta colar en la panadería o en el super pues también se lo digo ¿o por ser mayor tiene derecho a hacer lo que le de la gana? Pues si es así yo digo que a la mierda la educación ala.
Todos los españoles trabajadores, legalmente inscritos como tales en los correspondientes organismos, cotizan mensualmente para el pago de distintas cuotas, entre ellas la de la seguridad social. Considero que este dinero no esta muy bien utilizado puesto que he notado en los últimos años un gran empeoramiento en la atención dada por la seguridad social a los pacientes. Hace unos años pedías cita por la mañana y te daban para la tarde. Ahora si tratas de pedir la cita por teléfono ya puedes preparar café y esperar horas y horas hasta que te lo cojan y cuando lo hacen la cita te la dan para tres días después, si acudes directamente al ambulatorio y pides que por favor te cojan en el mismo día te obligan a rellenar un papel para que declares que es urgente pues por lo visto cuando uno lleva un gripazo que no se aguanta de pie no se le nota. He pensado acudir a una médium para que me adivine cuándo tendré la gripe así voy llamando ya para pedir hora. Las dos últimas veces que fui a que me reconociera mi doctora le pedí que me enviara al especialista puesto que llevo tiempo sufriendo unos dolores que no son normales pero ella sin hacerme ningún tipo de reconocimiento interno ni externo considero que lo eran y que durarían 4 ó 5 días, de esto hace ya dos semanas y los dolores continúan. Así que me encuentro con que mis padres están cotizando a la seguridad social para pagar unos médicos de familia que no hacen nada por mi salud y unos especialistas a los que me han negado el acceso repetidamente. 
Se acerca la noche de fin de año y los precios se disparan. Un apartamento que te cuesta normalmente 20 euros dos días viene costar unos 200 los días 31 de diciembre y 1 de enero (televisión y calefacción aparte), los restaurantes hacen su agosto doblando y triplicando los precios, las tiendas venden esa ropa que normalmente no compramos porque solo te la pones una vez en nochevieja camisetas con purpurina, vestidos que los miras y te quedas ciego..., los supermercados venden más alcohol en esos días que cualquier viernes o sábado, discotecas que normalmente son gratis cobran entrada así que nos encontramos pagando por entrar a un sitio al que hemos entrado por la cara miles de veces. Y es que parece que eso de que sea la última noche del año hace que sea especial y haya que montar una juerga de la ostia y claro hay que aprovecharse de la gente y sacarles todo el dinero que puedas o más. Yo creo que no hay porque gastar tanto dinero y eso que me he dejado una pasta con la ropita de fin de año, el apartamento, etc. La verdad para mí sí es especial esa noche pues marca el fin de un año, quizás ha sido mejor o peor pero hay seguimos junto a los nuestros más contentos o más tristes luchando día a día ya sea trabajando para ahorrar y poder vivir más desahogados o estudiando para poder trabajar en un futuro por eso hay que celebrarlo con amigos o con familia como a uno le guste más, yo, la verdad, prefiero celebrarlo con mis amigos de todo el año con los que he compartido tantas juergas y también algunas tristezas pues la nochebuena la comparto con mi familia con los que se que siempre estarán hay ya que aunque los amigos no se pierden uno se hace mayor empieza a trabajar y tiene menos tiempo que compartir con ellos, además algún día quizás sea yo la que se quede en casa comiéndose las uvas mientras ve como sus hijos se marchan a disfrutar ¡menosmal que para eso aun queda mucho!. Que todos vuestros deseos se cumplan, no os atragantéis con las uvas y ¡feliz año nuevo!
Los tiempos cambian y lo digo yo, una chica de tan sólo 20 años a la que siempre le han dicho que su generación lo ha tenido todo, que ha tenido más oportunidades que nadie y cosas así, la verdad empiezo a estar un poco harta de todas esas cantinelas que no me parecen ciertas. No he vivido la dictadura franquista ni quisiera vivirla, sé que se sufrió, que no había libertad de expresión, que mis padres solo comían pollo asado los días especiales y que no todo acababa siempre bien como en la serie de televisión española que hace un amago de lo que eran aquellos tiempos y que encanta a muchas amas de casa, entre ellas mi madre así que dejare de criticar que sino luego me dirá cosas como Pili hija que cosas dices, ala hija eso no lo pondrás ¿verdad?, etc. No, mi generación no lo ha tenido todo sino que hemos sido los que hemos empezado a tener, los que no nos hemos puesto a trabajar nada mas terminar la E.G.B y hemos visto el nacimiento de nuevas tecnologías. Cuando era pequeña tener un ordenador era para mi un sueño, los cd,s eran algo inimaginable y los gráficos de mi videoconsola eran tan primarios que parecían haber sido dibujados por un niño pequeño; sin embargo ahora los críos de apenas 10 años tienen ordenador y videoconsolas cuyos gráficos son tan reales que llegan a confundirlos y atraparlos de forma que tenemos niños que pasan la mayor parte de su tiempo libre delante de una pantalla ya sea viendo un dvd (inimaginable cuando mi padre compro nuestro primer video), creyéndose el héroe de un juego de rol o navegando por Internet sin ningún control.